Manejo del microbioma intestinal en pollos y gallinas

La integridad intestinal es la columna vertebral del rendimiento, pues por el intestino pasa del 70 al 80 por ciento del costo de producción.

Al momento de la eclosión, los pollitos de un día de edad, ya sean de líneas ligeras o pesadas, contienen una microbiota subdesarrollada en el intestino. Antes se creía que el sistema gástrico de los pollitos estaba totalmente limpio. No obstante, hoy hay evidencias sustanciales que indican que por lo menos tienen 102 de bacterias, es decir, 1000 bacterias por gramo de contenido digestivo.

En este momento en particular, esta microbiota subdesarrollada no ayuda a desarrollar el sistema inmunitario. Ante una amenaza, el ave va a responder con lentitud, lo cual es un alto riesgo para que haya colonización de patógenos.

Factores que influyen

Hay factores que afectan el establecimiento y la fluctuación de la microbiota, algunos de los cuales no podemos controlar, como lo son la edad, el ADN o el sexo.

Lo que sí podemos controlar es el sistema de producción, el uso de medicamentos o vacunas, la temperatura, la cama y la colocación. Pero varios aspectos fundamentales son el alimento, el agua y los aditivos que podemos dar, así como la bioseguridad.

La bioseguridad es esencial en la planta de incubación. Sin embargo, el problema de los desinfectantes es que no son específicos. “Matan bacterias malas, pero también buenas, que son esenciales para el desarrollo del intestino”, dijo el Dr. Luis Valenzuela, de Biomin, durante la Cumbre Avícola Latinoamericana, celebrada en febrero en Atlanta, Georgia.

Entra en juego la hipótesis de la higiene, de que cualquier animal o humano tiene que estar expuesto a temprana edad a diferentes microorganismos para crear respuestas favorables que fortalezcan el sistema inmunitario y la tolerancia.

“Nuestra tarea es proveer al animal aditivos o una dieta que favorezca la inoculación del intestino con bacterias indispensables para el sistema gástrico”. Los momentos críticos para el establecimiento y diversificación de esta microbiota son:

  1. La eclosión, que es donde empieza la inoculación
  2. Los primeros 7 días, cuando hay una rápida rotación microbiana y un intercambio constante de microbiota
  3. Del día 7 al día 14, cuando se establecen las poblaciones bacterianas en el intestino delgado
  4. Después de los 30 días, que se establece la población cecal bacteriana

Carrera por la colonización

Cuando se habla de utilizar aditivos preventivos, hablamos de probióticos. El probiótico es un aditivo de competencia exclusiva, que hay que utilizar lo más rápido posible: a temprana edad.

Las vellosidades intestinales tienen receptores que no son específicos, por lo que cualquier bacteria puede entrar al momento de la eclosión y se adhiere, lo que ocasiona respuestas polifactores o antifactores, o se crea intolerancia.

“La idea es que los probióticos o que las bacterias benéficas se establezcan en esos receptores lo antes posible y tratar de evitar la expresión de receptores que crean respuesta proinflamatoria”, explicó Valenzuela.

¿Por qué proinflamatoria? Porque es uno de los pocos receptores que son específicos para los lipopolisacáridos, las fracciones de las paredes bacterianas. De esta forma, cuando hay una microbiota establecida, tenemos esta competencia exclusiva antes mencionada.

Microbiota equilibrada

Una microbiota balanceada es la que está en un estado eubiótico, es decir, que posee un 90 por ciento de bacterias intestinales benéficas y menos del 0.01 por ciento patógenas. Las bacterias acompañantes pueden ser oportunistas porque no todas las E. coli o los clostridios son malos.

En una granja, para ver si las aves están o no en un estado eubiótico, hay algunos que se enfocan en la calidad de las heces. Cuando hay bacterias benéficas o hay una microbiota balanceada, las heces fecales son bastante consistentes, sin humedad. Cuando hay disbiosis es lo contrario.

Desarrollo de la microbiota en pollos y gallinas

El desarrollo de la microbiota en pollos de engorde varía desde el primer día hasta los 42 días. Está muy dominada por lactobacilos en el íleon, donde hay una mayor diversificación, y en los pollitos de siete días mayormente por clostridios.

La población de clostridios cambia conforme va pasando el tiempo; a los 35 días se ven más lactobacilos. En el ciego hay muchos lactobacilos, pero ahí es donde hay una mayor diversificación de bacterias, pues hay salmonela, E. coli, campylobacter, entre otras.

Los lactobacilos son los que se encargan de mantener a los patógenos o bacterias oportunistas en el menor número posible. Por desgracia, el escenario ideal no es lo que se ve en las granjas.

En gallinas es totalmente diferente. En pollitas de un día o en la primera semana, el grupo de proteobacterias es el mayormente representado, que no es lo ideal, porque hay E. coli y salmonela, aunque por fortuna esto se puede corregir con el tiempo y el desarrollo de la microbiota.

Interfaz inmunidad-ambiente

“La microbiota es el segundo cerebro”, señala el experto de Biomin, “pues sabemos que controla el 80 por ciento de la respuesta inmunitaria”. Esta respuesta inmunitaria se activa en el intestino, que es el órgano compuesto más grande, desde el esófago hasta la cloaca. Es la interfaz entre el sistema inmunitario del ave y el medio ambiente.

Considerando además que descompone, digiere y absorbe todos los nutrientes, y que por él pasa del 70 al 80 por ciento del costo de producción —el alimento—, entonces la integridad intestinal es la columna vertebral del rendimiento, de cualquier aditivo y medida que se tome en la granja.

Así, Valenzuela considera que uno de los objetivos principales tiene que ser mejorar la función de barrera que tiene el intestino.

Conexión órganos-microbiota

De entre los órganos del sistema digestivo más importantes está el buche, que es donde se almacena por primera vez el alimento por un tiempo prolongado y también donde los patógenos o las bacterias que entran tienden a ser neutralizadas por las bacterias residentes. Por eso, “es indispensable que el Lactobacilus salivarius se desarrolle porque, mediante la liberación de bactericidas, neutraliza patógenos”.

Luego, viene el intestino delgado, al que llegan bacterias que sobreviven al pH ácido del estómago. El intestino delgado es la parte idónea donde todos los patógenos atacan. Finalmente, los ciegos es el área donde hay que dar soporte porque es donde está la mayor presencia de patógenos y bacterias oportunistas.

Probióticos y paredes intestinales

Las capas de la mucosa del duodeno, yeyuno e íleon son dos: la externa y la interna, esta última adherida a las paredes intestinales. El lugar predilecto del intestino delgado para las bacterias patógenas oportunistas es la mucosa interior porque es muy delgada, ya que su función principal es dejar que los nutrientes entren y se absorban. Y esto precisamente da paso a que bacterias como los clostridios entren a la pared celular y causen daños.

De ahí la importancia de establecer bacterias como el Enterococcus faecium, conocida como la guerrera del intestino. Libera ácidos de cadena corta —como el ácido butírico—, lo que ayuda a reparar los daños generados.

De entre los probióticos, los lactobacilos tienen diferentes funciones, como fortalecer el intestino. Cuando una bacteria se desarrolla con un estado eubiótico, se adhieren a las microvellosidades y le permiten a los enterocitos ahí ubicados liberar la proteína que permite que las uniones estrechas o zonas de oclusión sean más fuertes y que el intestino delgado sea selectivamente permeable. Cuando no están presentes estas bacterias, las zonas de oclusión son muy débiles, lo que ocasiona un intestino permeable.

No obstante, debe tomarse en cuenta que no todos los probióticos son iguales y tienen diferentes funciones.

En conclusión, el avicultor tiene que saber cuál es el objetivo de tener una microbiota saludable y usar probióticos que contengan las bacterias esenciales que formen parte de esa estrategia. La microbiota intestinal afecta directamente la salud intestinal y en general del animal.


Como influir en el establecimiento de una microbiota saludable

Suplemento/estrategia preventiva Acción
Probióticos esenciales ·       Configuración de la respuesta inmunitaria para mejorar el desarrollo de una buena respuesta

·       Exclusión competitiva de bacterias benéficas que promueven la “resistencia a la colonización” del epitelio intestinal por patógenos

·       Cama seca debido a la microbiota equilibrada

Fitogénicos ·       Reducción de la carga bacteriana en el interior del sistema digestivo

·       Conservación de nutrientes para el huésped

·       Menos inflamación debido a la disminución de la expresión del factor NF KB

Ácidos orgánicos ·       Actividad antimicrobiana eficaz contra las bacterias gramnegativas (E. coli, Salmonella)
Vacunas ·       Preparación destinada a generar inmunidad adquirida

·       Estimulación de la producción de anticuerpos específicos

 

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