En más de dos millones de toneladas se ajustaron las estimaciones para la cosecha 2019-2020 de estos dos importantes insumos avícolas.
Un mercado con una oferta confiable y de buenos precios parece construir las proyecciones de producción de maíz amarillo duro y soya en los dos mayores productores suramericanos y unos de los mayores exportadores mundiales de estos granos. Recientemente, se dio el anuncio de la cosecha brasileña y ahora fue el turno para la vecina Argentina.
De acuerdo con un cable de la agencia noticiosa Reuters, “la Bolsa de Cereales de Buenos Aires (BCBA) elevó sus previsiones para las cosechas de soja y maíz del ciclo 2019-20 de Argentina a 54.5 millones y 50 millones de toneladas, respectivamente, debido a las abundantes lluvias que recibieron los cultivos”.
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El informe continuó reseñando que tales estimaciones “superan los 53.1 millones de toneladas que la BCBA había previsto para la oleaginosa y los 49 millones de toneladas que había calculado para el cereal. Los productores argentinos ya sembraron el total de los 17.4 millones de hectáreas reservados para la soja, cuya recolección comenzará en marzo de 2020”.
En lo que respecta al maíz, la BCBA afirmó que continuaron incrementándose las expectativas de rendimiento “de los cuadros tempranos y tardíos de maíz con destino grano comercial. La recolección del maíz 2019-20 está en sus primeras etapas, con solo el 1% de los 6.3 millones de hectáreas sembrados cosechado”.
A mediados de febrero, se reportó de una posible baja en el precio de la soya por la alta cosecha brasileña sumada a la menor demanda china de todo tipo de commodities.
A finales de 2019, Industria Avícola reportó que en Argentina los cultivadores de soya liberaron sus stocks para evitar mayores impuestos con el cambio de gobierno. Esto también aportaría a la baja en el precio de la oleaginosa.