La decisión del Ministerio de Agricultura y Desarrollo Rural tendrá vigencia hasta el 30 de junio y busca garantizar el suministro de granos ante un eventual cierre de las exportaciones estadounidenses por la pandemia de COVID-19.
Con un arancel del 0%, los tres principales granos usados como materia prima para la actividad pecuaria en Colombia podrán llegar desde Mercosur, dentro de un plazo coyuntural que se prolongará del 9 de abril hasta el 30 de junio de 2020.
Así lo dio a conocer Rodolfo Zea, ministro de Agricultura y Desarrollo Rural en este país andino, quien agregó que la medida podría ser prorrogada por los siguientes tres meses del segundo semestre. Esta decisión complementa otras que previamente había expedido el gobierno colombiano en aras de garantizar el funcionamiento de la cadena productiva de la proteína animal durante la emergencia global ocasionada por el COVID-19.
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Esta facilidad transitoria había sido solicitada por la agroindustria pecuaria, golpeada por la caída de las ventas y la creciente devaluación, que elevó los costos de producción en un 30%, pues la soya, el maíz amarillo duro y el sorgo son casi en su totalidad importados.
Al ser consultado por esta decisión, el presidente ejecutivo de la Federación Nacional de Avicultores de Colombia (Fenavi), Gonzalo Moreno, explicó que “no se pidió tanto por el impuesto, sino para mantener abiertas las opciones de aprovisionamiento de materia prima, ya que no se descarta que Estados Unidos decida no exportar más estos granos, y ese país es hoy nuestro principal proveedor por efectos del TLC (tratado de libre comercio) vigente desde el 2012”.
A la fecha, de un contingente sin arancel de 3.4 millones de toneladas de maíz norteamericano, la agroindustria y la industria alimenticia colombiana habían importado 2.1 millones de toneladas. “Esas 1.3 millones de toneladas se agotarían normalmente entre julio y agosto, pero no sabemos si se va a mantener ese flujo comercia, dada la gravedad con la cual el coronavirus está atacando a los Estados Unidos”, indicó Moreno.
Una vez agotado este contingente, el maíz estadounidense entra a Colombia con un impuesto del 6.5$. Con Mercosur, el arancel varía por el sistema andino de franja de precios, que en la actualidad se encuentra alrededor del 3.1%. La soya y la torta de soya estadounidense no pagan impuestos de importación, sin importar la cantidad importada.
“Reiteramos, no es un tema arancelario, es de tener un plan B para garantizar la entrada de estos granos, principalmente del maíz, en caso de que Estados Unidos tenga que cerrarse”, explicó el titular de Fenavi.
A esta medida se habían opuesto los agricultores colombianos, para quienes el ministro Zea dijo que “en nuestra cartera estamos interesados en la promoción de la producción nacional de maíz, pondremos en marcha una serie de incentivos para los campesinos dedicados a dicho cultivo”.