Quizá EE. UU. no logre exportar soya como antes a China

Para Estados Unidos será difícil volver a recuperar por completo la participación de mercado, ya que China depende cada vez más de la soya de Brasil y Argentina, según economista Paul Aho.

Pronto podría anunciarse un acuerdo en el que China reanudará la importación de soya de Estados Unidos, pero el economista Paul Aho dijo que no hay que esperar que este país vuelva a ser el gran comprador que fue antes.

Al hablar en la Conferencia Anual de la Carne en Dallas, Texas, el pasado 4 de marzo, Aho mencionó un artículo del Wall Street Journal que acababa de leer, en el que decía que el mercado chino pronto se reabriría a la industria de la soya de Estados Unidos.

China, anteriormente el mayor comprador de soya estadounidense, fundamentalmente detuvo su importación a comienzos del año agrícola 2018-2019, en medio de la guerra comercial entre esos dos países.

Aho, economista y consultor de Poultry Perspective, dijo que China, el mayor consumidor de soya del mundo, ahora depende mucho más de los países latinoamericanos para abastecerse, lo que hace más difícil para Estados Unidos recuperar esta participación de mercado.

“Si la información del Wall Street Journal es correcta, China nos empezará a comprar un poco más de soya [a Estados Unidos], pero creo que es importante recordar que es probable que nunca recuperemos todo ese mercado nuevamente”, sostuvo Aho. “Perdimos algo de la participación de mercado frente a Brasil y Argentina, aunque empezaremos a venderle soya a China, pero no tanta como antes”.

Durante su presentación, Aho mostró una diapositiva que ponía de manifiesto que, durante el año agrícola 2018-19, las exportaciones de soya de Estados Unidos al mercado de la Unión Europea fueron más del doble. Una situación similar ocurrió con las exportaciones al resto del mundo.

Sin embargo, si se comparan los tres años agrícolas anteriores, el total de las exportaciones de soya de Estados Unidos disminuyó significativamente, lo que a cambio llevó a un excedente y a precios más bajos de la soya.

“¿A dónde fue a parar? Pues, se almacenó. Es por esto que en 2019 nuestro inventario será de casi mil millones de bushels de soya”, apuntó Aho.

X