En total, 30 instalaciones de procesamiento de carne, aves y cerdos fueron autorizadas en Brasil y Chile para exportar productos cárnicos a dicho mercado asiático hasta 2023, por ahora.
El gobierno de Filipinas autorizó la importación de carne de varias instalaciones de procesamiento en Brasil y Chile. En específico, se trata de 24 instalaciones brasileñas de procesamiento de carnes, aves y cerdos, y otras seis plantas chilenas, según reportó PhilStar.
Ambos países cumplieron con los estándares requeridos por el gobierno filipino en cuanto al estatus sanitario, los procedimientos durante la cuarentena y los sistemas de inspección, según el secretario de Agricultura del país asiático, William Dar. Esta autorización es válida hasta abril de 2023.
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Los cortes cubiertos por el reciente acuerdo se han especificado y varían según el origen. Según el acuerdo, Brasil suministrará carne de cerdo, pollo, pavo y carne de res (excepto cabeza y cuello). Los productos importados de Chile incluirán canales de cerdo, carne de pavo y despojos.
En 2019, Brasil logró un récord en exportaciones mundiales de carne de cerdo. Esta tendencia al alza continuó en este año, según la Asociación Brasileña de Proteína Animal (ABPA). Durante los primeros cuatro meses de 2020, el volumen aumentó un 28% interanual a 280,000 toneladas métricas. La misma fuente informó de una expansión de más del 5% en las exportaciones de carne aviar a 1.365 millones de toneladas métricas para el período enero-abril.
Comercio continuo de carne desde España
El mes pasado, las autoridades filipinas renovaron la acreditación para las importaciones de carne de cerdo y res de España, informó Business Mirror. Con una validez hasta mayo de 2023, las últimas autorizaciones cubren canales y medias canales de cerdo, jamones, paletas, cortes de cerdo y despojos (incluido el hígado), así como varios cortes de res y despojos.
Con más de 122,500 toneladas métricas, España fue el principal exportador de productos de carne de cerdo a Filipinas el año pasado, representando alrededor del 36% del volumen comercializado.
Menos pollos de engorde y más cerdos en Filipinas
En los últimos meses, la producción de proteína animal en Filipinas se ha visto afectada negativamente por enfermedades graves. Se han reportado pérdidas significativas, particularmente entre los cerdos por la peste porcina africana (PPA), así como de la influenza aviar en las aves de corral. Ninguna de las enfermedades está aún bajo control.
A fines del año pasado, la Autoridad de Estadísticas de Filipinas (PSA) informaba que las cifras generales de carne aviar disminuyeron un 4.3%. Para los pollos de engorde, el inventario disminuyó un 12% interanual y hubo un 3.2% menos de pollos nativos.
El número de bovinos fue ligeramente superior a los 12 meses anteriores. Sin embargo, la PPA ya estaba afectando el número de cerdos de traspatio, que disminuyeron en un 2.4%. Con el número total de cerdos comerciales aumentando en un 6.2% interanual, hay algunas pruebas de que este sector había evitado en gran medida la enfermedad.
Respuesta del gobierno al COVID-19
A mediados de mayo, el Departamento de Agricultura filipino propuso tres intervenciones destinadas a revivir los sectores agrícola y pesquero del país tras la pandemia de COVID-19. Los objetivos clave para estas medidas de estimulación se centraron no en la producción de ganado y aves de corral, sino en el cultivo de arroz y el apoyo a la estructura del mercado de alimentos y los ingresos de la población rural.
Al comentar sobre el paquete de estímulo de PHP 66,000 millones (US$1,300 millones), el secretario de Agricultura dijo que el sector agropecuario desempeña un papel clave en la mitigación de los efectos de la pandemia en la producción de alimentos, el acceso al mercado y el empleo rural.
Los primeros pasos del Departamento de Agricultura han sido con grandes empresas agroalimentarias, instándolos a formar asociaciones con empresas más pequeñas para beneficio mutuo.