No renegociarán salarios en plantas avícolas argentinas

La gremial Centro de Empresas Procesadoras de Aves (CEPA) se abstiene de revisar las condiciones pactadas con sindicatos en el primer semestre.

La directiva de la Federación Gremial del Personal de la Industria de la Carne y sus Derivados de Argentina (FGPICyD) informó recientemente su “profunda preocupación” ante la respuesta enviada por el Centro de Empresas Procesadoras de Aves (CEPA), con motivo del pedido de reapertura de la paritaria salarial convenida para el periodo abril de 2018 a marzo de 2019.

Así lo informó el medio de comunicación entrerriano Paralelo 32, citando de las mismas fuentes que, “como manifestamos en las misivas que enviamos y fueron recibidas por CEPA el 4 de septiembre de 2018 y el 5 de octubre de 2018, es necesario reabrir la paritaria salarial, atento al deterioro del poder adquisitivo del salario, lo cual vulnera las necesidades básicas de los trabajadores y grupos familiares”.

De acuerdo con el mismo medio, la respuesta del CEPA apunta a querer dilatar la reapertura salarial, argumentando, entre otras cosas, que ante la situación que vive el país “los trabajadores deberían aceptar la pérdida de poder adquisitivo”.

En mayo pasado y luego de varios meses de negociaciones, empresarios avícolas y sindicatos definieron paritarias para el periodo abril 2018 / marzo 2019. En dicha negociación, se definió un incremento del 15 por ciento pagadero en dos tramos, más un bono compensatorio de ARS7,000 (US$200) dividido también en dos cuotas en diciembre de 2018 y febrero de 2019.

El dirigente sindical Elbio Schaab explicó que “estaba la promesa de que el 19 de noviembre de 2018 nos íbamos a reunir nuevamente para analizar los números, de acuerdo a cómo marchara el proceso inflacionario y económico del país”.

Obviamente, la respuesta del CEPA no es aceptada por la FGPICyD. Schaab añadió que “todo cambió en este tiempo, todo se aceleró y eso nos obliga a buscar soluciones más rápido, porque la situación de los trabajadores es muy complicada. Los trabajadores no son responsables de la realidad en que se encuentra inmerso el país, y esta organización gremial no declinará en el pedido de una justa recomposición salarial”.

De acuerdo con el diario bonairense BAENegocios, Argentina es el país que más devaluó su moneda en el mundo en 2018, con una depreciación de 100.2 por ciento en septiembre de este año. Además, se estima que la crisis cambiaria podría redundar en una inflación de 31.2 por ciento, cifra que solo supera Venezuela.

A principios de año, el peso argentino se cambiaba a cerca de ARS19 por cada US$1. El cambio tuvo su peor momento a finales de septiembre, cuando ARS40 equivalían a US$1.

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