Gonzalo Moreno, presidente ejecutivo de la gremial avícola colombiana, sostiene esta proyección en el impacto global al mercado de alimentos por la epidemia de PPA en China.
Este año, la carne de pollo desplazará del primer lugar de consumo mundial a la de cerdo, hecho que se dará con varias vigencias de anticipación a lo proyectado. “El pollo será desde este 2019 el rey de las proteínas en el mundo”, aseguró recientemente el presidente ejecutivo de la Federación Nacional de Avicultores de Colombia (Fenavi), Gonzalo Moreno.
Sus declaraciones aparecieron en el diario económico bogotano Portafolio. Allí, el dirigente gremial explicó que, a raíz del brote de peste porcina africana (PPA) —producida por un virus mortal, de rápida propagación, incurable y de alta resistencia, incluso en carne procesada y congelada—, China está viendo mermado el 50 por ciento de su producción (unos 200 millones de cerdos han tenido que ser descartados).
A juicio de Moreno, esto está haciendo que el gigante asiático demande toda la carne que pueda venderle el resto del mundo, no solamente de cerdo, también de su sustituto natural por precio y características de rápida producción: el pollo. Si bien Colombia y la gran mayoría de países latinoamericano no son exportadores extracontinentales de carne, esta situación será benéfica para sus agroindustriales locales dedicados a producir proteína animal.
“El pollo va a pasar a ser el rey de las proteínas a nivel mundial a partir de esto que pasó. A nosotros nos daba que en el 2023 el pollo superará al cerdo porque la tasa de crecimiento del pollo era 3.4% anual y la del cerdo, 1.9%; con esto, ya el pollo supera completamente al cerdo en el mundo”, arguyó el experto.
Agregó que “todo lo que exportaban para Estados Unidos, Brasil y otros países lo van a volcar a China. Toda la economía mundial se va a volcar a eso, es un efecto total. Es una oportunidad histórica que tenemos los productores de pollo, principalmente. Eso nunca había pasado. Va a ser un cambio de juego a nivel mundial”.
Siguió comentando que “Colombia no exporta nada —de pollo— por un tema sanitario, pero al interior va a haber un cambio porque ya no va a entrar tanto el producto importado de Estados Unidos, sino que eso se va a ir a otros mercados que están dispuestos a pagar más por la necesidad que tienen. Lo que puede pasar a nivel mundial es que el precio de las proteínas aumente en cada país, eso es lo más lógico”.
Esta circunstancia hará que los productores avícolas vean, luego de muchos años, un aumento real en los precios de sus productos. “No solo va a haber un aumento de precios, va a aumentar la demanda, tiene que hacerlo, y va a incrementar la producción también”.
Descontando el efecto de la inflación y el comportamiento de la tasa de cambio (70 por ciento de los costos de producción se da en dólares para los avicultores colombianos), en los últimos 10 años el precio detallista de la carne de pollo y huevo prácticamente se ha mantenido estable en términos reales en ese país suramericano.