Se anunció la adquisición de 85,000 toneladas que se tendrán como reserva para la producción de carne de cerdo y pollo.
La oficial Empresa de Apoyo a la Producción de Alimentos (Emapa), adscrita al Ministerio de Desarrollo Productivo y Economía Plural de Bolivia, anunció que compró para acopio 85,000 toneladas de maíz amarillo duro, “con el fin de cubrir el abastecimiento de los productores avícolas y porcícolas”.
Según un comunicado de la agencia, esta compra beneficia directamente a cultivadores en los departamentos de Santa Cruz, Tarija, Chuquisaca y Beni, con la posibilidad de expandir las adquisiciones a 92,231 toneladas, si se tienen en cuenta los rendimientos esperados para 24,473 hectáreas. Emapa dijo que reconocerá un precio de BOB61 por quintal (US$8.80).
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La mencionada acción se enmarca dentro del programa ‘Apoyo a la producción de maíz’. Aparte de garantizar la compra de la producción, esa iniciativa incluye “insumos agrícolas, como semilla certificada sin cobro de interés, transfiriendo asistencia técnica, capacitación permanente, monitoreo y fortalecimiento organizacional, con innovación tecnológica”.
De acuerdo con información conocida por Industria Avícola de fuente confiable, la actualidad de la avicultura boliviana podría resumirse de la siguiente manera: mejoraron sustancialmente los precios de venta del huevo, pues coincidió la pandemia con una reducción previa del encasetamiento de ponedoras, en un 5%. El consumo de esta proteína habría subido 30%.
El pollo viene de cuatro años malos por sobreproducción e informalidad. Para la presente vigencia, se había logrado restringir la oferta en 7%. No obstante, la demanda de pollo cayó entre 50 y 60% por la actual cuarentena, debido a la crisis del canal horeca. El ingreso de los integrados se redujo 50% por kilo de ave en pie, pero tal disminución no ha sido trasladada al consumidor final.
En cuanto a insumos, se viene presentando lentitud en la importación de vacunas, aditivos, fármacos, vitaminas y genética, que podría agravarse en las próximas semanas. Se vive alta especulación por parte de intermediarios del huevo y se califica sin dudarlo de “extrema gravedad” la condición del sector pollo, por lo que se “trabaja con el gobierno en un plan de salvataje económico para las empresas”.