El precio pagado por el pollo en el mercado internacional está aún lejos de los valores récord alcanzados en el 2008, en cambio los precios de otras carnes están en clara recuperación.
Recientemente, la Agencia de las Naciones Unidas dedicada a los temas de Agricultura y Alimentación, FAO, mostró que los precios de la carne en los mercados internacionales están en clara recuperación. Al punto de alcanzar, a principios de 2011, los precios récord registrados en el segundo semestre de 2008, cuando se produjo la crisis económica mundial.
Sin embargo, al parecer los precios del pollo están muy lejos de repetir esa cifra. Por lo menos, eso se sugiere a partir de los datos relativos a las importaciones de uno de los principales y más tradicionales importadores de este producto, Japón.
De acuerdo al rastreo realizado por la FAO, el mayor precio pagado por Japón sobre las importaciones de carne de pollo se registró en diciembre de 2008, mes en el que el valor de una tonelada de producto alcanzó un valor promedio aproximado a los US$4,000 por tonelada.
Si el fenómeno de la recuperación en el precio de las carnes fuera alcanzado también por el pollo, las importaciones japonesas estarían situadas en el máximo anterior o muy cerca de éste.
Entre tanto, los valores indicados por la FAO muestran que después de experimentar una reducción de casi 50% en el corto espacio de 12 meses (US$2,036 / tonelada en diciembre de 2009), los precios pagados por los importadores japoneses, a pesar de venir hasta la fecha presentando una apreciación continua, sólo se recuperó la mitad de la pérdida sufrida, o sea a principios de año, alcanzando los US$3,000 / toneladas.
En este contexto para lograr los valores anteriores se debe mostrar una recuperación de aproximadamente el 35%, los cuales se registraron hace más de dos años atrás.